Puno exige, no ser excluido del gaseoducto sur peruano



Escribe: Alberto Quintanilla Chacón | Opinión - 20 Nov 2014


1.- Diversas organizaciones populares de Puno, entre ellas el Frente de Organizaciones Populares (FOP), liderado por Guido Vélez, han llevado adelante un paro regional los días 18 y 19 de noviembre, el cual ha tenido una contundencia relativa, principalmente en las ciudades de Juliaca, Puno, Ayaviri, entre otras.

La demanda principal de esta paralización es que no se excluya a la Región de Puno, de los beneficios del Gas de Camisea y que la construcción de un gaseoducto por las regiones del sur del Perú pase por nuestra región.

El Gobierno Peruano, presidido por Ollanta Humala Tasso, ha publicado, el domingo 16 de noviembre del 2014, en medio de comunicación nacional, un encarte en el cual se informa, que el Gaseoducto Sur Peruano, se construirá a partir del 2015, con un costo inicial de 4,000 millones de dólares, en dos etapas, una primera que consiste en la construcción de un ducto que llevará el Gas desde las Malvinas, Camisea, hasta el eje Ilo, Matarani, y posteriormente en una segunda etapa, en la que construirán ramales hacia Cusco, Puno, Arequipa, Tacna y otros.

2.- El uso de los 14 Trillones de Pies Cúbicos de reservas de gas natural que tiene el Perú, es una cuestión estratégica, no es solo un problema de un simple negocio, ya que por la magnitud de los gaseoductos, de las fábricas y los usos que se le dé, al gas natural de todos los peruanos, van a influir en la distribución de la economía del país en su conjunto, de las próximas décadas, por lo que las decisiones que se tomen en torno a estos temas, son de trascendencia estratégica.

El primer tema, son las reservas de gas natural que posee nuestro país, en los yacimientos de gas que tenemos, principalmente en Camisea, Cusco, habría 14.1 trillones de pies cúbicos (TCF), de los cuales, ya se han vendido unos 7 trillones (TCF), para ser exportados a México, California Baja, a un precio varias (tres por lo menos) veces menor del gas para el consumo interno del país, con la autoría o complicidad de los Gobiernos de Valentín Paniagua, Alejandro Toledo, Alan García y Ollanta Humala.

De los otros 7 trillones de pies cúbicos, que nos quedarían, 4 trillones (TCF) están destinados al actual gaseoducto que lleva gas natural de Camisea, hasta el eje Ica, Lima, que es la cantidad que garantiza un uso razonable de gas durante 20 años.

Quedándonos 3 trillones (TCF), para el Gaseoducto Sur Peruano, siendo de partida una cantidad menor a los 4 trillones (TCF), que son necesarios para justificar la construcción de un gaseoducto, que nos abastezca de gas natural durante 20 años, la explicación sería que solo se pretende llevar el gas para abastecer una Planta petroquímica, para producir bienes industriales derivados de los hidrocarburos, y ya no quedarían reservas para otros usos, por lo que los ramales, que se construirían en una segunda etapa, no estarían garantizados, a no ser de que se descubran más reservas de gas natural.

Hay que señalar que el otro gaseoducto proyectado desde Camisea Hasta Tumbes, en la publicación hecha por el Gobierno Nacional de Ollanta Humala, en el encarte referido, es muy dudoso que se llegue a concretar, ya que no hay la cantidad necesaria de reservas probadas de gas natural, de por lo menos unos 4 o 5 trillones (TCF).

Un segundo problema, es el advertido por el artículo “¿Adiós al Gaseoducto del Sur?” publicado en la revista Otra Mirada del 8 de noviembre del 2014, reproducido, el 11 de noviembre por Los Andes, donde se hace referencia a la presentación hecha el 2013 en Houston, Texas, Estados Unidos, del llamado “Gaseoducto del Sur Peruano”, con características diferentes a las que tenía la anterior propuesta de construir el “Gaseoducto del Sur”, donde se señala, que:

El ducto central del Gaseoducto desde Camisea a Lima, sería ampliado de 32 a 36 pulgadas, aumentando su capacidad de transporte en un 63%, garantizando el abastecimiento de gas natural para los usuarios de Lima Metropolitana.

A su vez que el ducto hacia el Sur del Perú, sería reducido a 32 pulgadas, como un ramal secundario, hacia Mollendo, sin capacidad de impulsar la masificación del consumo del gas, tampoco se considera la construcción de una planta de etanol, que es parte fundamental del proyecto de construir una planta petroquímica, en el eje Mollendo, Ilo, que serviría para la producción de fertilizantes y plásticos.

3.- El que se haga realidad la construcción de un gaseoducto que abastezca de este recurso energético natural, que impulse el desarrollo de las regiones del Sur del Perú, depende, de que se garantice una oferta de gas, de unos 3 a 4 trillones de pies cúbicos.

Además debemos garantizar una demanda suficiente de gas natural, que empiece por ubicar la planta petroquímica, en el Altiplano cerca de Juliaca, y no en la costa entre Ilo y Matarani.

La decisión de construir el gaseoducto Sur Peruano, es una decisión política, que se debe tomar en función de que si se quiere impulsar la descentralización del país y por consiguiente si se quiere o no impulsar el desarrollo económico de las regiones del sur del Perú.

El problema no es si se trae o no gas natural, en carros cisternas (ducto virtual), para uso doméstico de gas natural, el tema es político si se quiere o no descentralizar el Perú, y si se quiere no el desarrollo económico de las regiones del sur del país.

4.- Lo que demanda la región de Puno, es que el trazo de la troncal principal del gaseoducto Sur Peruano, se modifique y pase por nuestra región, no solo el ofrecimiento de construir un ramal, además demandamos que la Planta Petroquímica, para producir fertilizantes y plásticos, sea construida en nuestra región y no en la costa.


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