Los Andes

En horas de la tarde, pese a la lluvia, los pobladores destrozaron y quemaron discotecas del jirón Moquegua. Hasta el cierre de edición de este matutino, los ataques seguían a más antros de perdición.

Estelas negras, símbolos de la indignación de todo un pueblo, recorrieron los cielos de Juliaca, tumultuosas y asfixiantes, cual si fueran el reflejo del paso de los pobladores que las provocaron previamente, corajudos, despechados y furibundos. Su sentir era uno solo: decirle no a la delincuencia.

AVENIDA CIRCUNVALACIÓN
Así las cosas, no tuvieron reparo en destruir más de 15 locales nocturnos ubicados en las inmediaciones de la avenida Circunvalación con el jirón Piérola. Allí, al caer la tarde, puertas, mesas, sillas y otros enseres fueron quemados ante el estupor de los propietarios.

Todo comenzó aproximadamente a las 5:00 de la madrugada. Los manifestantes, como cabía esperar, estaban bloqueando las proximidades del terminal terrestre, hasta que descubrieron que varios locales nocturnos ubicados en la zona en mención atendían normalmente, en un acto desvergonzado y descarado ante los anuncios de la población.

Esto exacerbó los ánimos generales. En consecuencia, decidieron apostarse frente a dos de estos locales y, tras ello, destruir sus puertas y quemar todo lo que albergaban en su interior. Muebles, equipos de sonido, varias cajas de cerveza, licor, entre otras cosas, fueron incinerados.

Tras esto, y al advertir que en la zona existen más locales semejantes, se dirigieron a cada uno de ellos. Así, destruyeron los locales Opus, Conjuro, Tercer Piso, Casa Amarilla, entre otros, así como un hospedaje denominado “Al Fondo hay Sitio�, que era aledaño a los antros de perdición.

Las arengas de los más de 600 pobladores, que pedían la proscripción de la delincuencia de la ciudad, acompañaron los actos cuasi vandálicos, que perjudicaron también -según lo informaron después- a tiendas de diversa índole del sector.

Horas después, los manifestantes se enfocaron en los locales existentes de la 12ava cuadra del jirón Piérola, así como en los de los jirones Miraflores y San Agustín, donde saquearon y quemaron aproximadamente 12 establecimientos.

Mientras esto ocurría, otra cantidad de pobladores se dirigió al frontis del Penal La Capilla, donde exigieron el cierre definitivo del establecimiento penitenciario. De no ser escuchados, señalaron, radicalizarán su medida hasta incluso convertirla en una de carácter indefinida.

JIRÓN MOQUEGUA
Ni siquiera la lluvia pudo contener la rabia de los quejosos, quienes se dirigieron raudos hasta el jirón Moquegua, donde funcionan dos discotecas con la fachada de tiendas comerciales. La discoteca “La Capital�, como los antros de la avenida Circunvalación, fue saqueada y sus muebles destruidos.

Los dueños del inmueble no pudieron hacer nada ante el ímpetu de los manifestantes, ya que estos los amenazaron con quemar toda la casa si se oponían. Ello fue felicitado por los vecinos de la zona, alegando que dicho local permitía que menores de edad ingirieran bebidas alcohólicas diariamente.

Al caer la noche, aproximadamente 25 locales fueron totalmente destruidos. De esta forma, el sentir del pueblo calcetero, despechado por los últimos actos delincuenciales, que acabaron con la vida de inocentes personas, tomó forma y amenaza con replicarse nuevamente hoy, en el segundo día de paralización.