Friday 29.03.2024 | Actualizado 11:08 (hace 1963 días)
Un joven músico perdió la vida de un ataque al corazón al no soportar la fuerte impresión que le causó ver a su amigo dentro de un ataúd, el mismo que había fallecido el lunes por la tarde, tras una larga agonía a causa de una fuerte golpiza que le propinaron unos delincuentes.
HECHO
Todo ocurrió en la intersección de la avenida Infancia con el jirón San Isidro de la ciudad de Juliaca, cuando se velaban los restos del conocido cantante de música tropical “Erick, el Rompecorazones”, quien pereció en el inicio de semana en las instalaciones de la Clínica Americana.
Fue cuando Max Antonio Quispe Portillo (27), conocido en el mundo musical como “Toñito”, se acercó al féretro de Oswaldo Mamani Cerpa, que sufrió el ataque al corazón, desvaneciéndose ante la mirada de los familiares y asistentes.
Inmediatamente, sus amigos intentaron reanimarlo haciéndole masajes en el pecho. “Apriétale fuerte el pecho”, “denle aire”, fueron las palabras que algunos decían, de acuerdo al video difundido en las redes sociales donde se aprecia el instante mismo del hecho.
ENTIERRO
Tras este incidente, lo trasladaron hasta una clínica particular, pero nada pudieron hacer los galenos porque el músico ya había perdido la vida en el trayecto. Su cuerpo fue trasladado hasta la vivienda del jirón Raúl Porras con Sucre para ser velado, y ayer por la tarde le dieron cristiana sepultura en el Cementerio Central de Juliaca.
Por su parte, el cantante Oswaldo Mamani fue llevado hasta el distrito de Chupa (Azángaro), para que simultáneamente sea enterrado en el cementerio de Humansaya, en el mismo distrito.
El guitarrista “Toñito” entró en shock al despedirse de su amigo, el cantante “Erick, el Rompecorazones”. Juntos formaron parte del mismo grupo musical.
¿Está usted de acuerdo con el proyecto de remodelación de la Plaza de Armas de Puno?