Los Andes

Tras una labor de inteligencia, agentes policiales del Grupo Terna capturaron infraganti a un sujeto que ultrajaba a una menor de edad, en el cerrito Huajsapata. Pese a ello, el depravado se defendió señalando que estaba allí para hacer sus necesidades.

HECHO
Marco Leoncio Llanos Alanoca (47) fue el sujeto capturado por los agentes policiales, en el preciso momento en que abusaba de la menor de iniciales R.E.CH.F. (16), en la cima del cerrito de Huajsapata. En el lugar también se halló maniatado con pasadores a Erickson R.F.C. (18), enamorado de la víctima.

Según el agente que venía realizando las labores de patrullaje, aproximadamente a las 20:45 horas del martes, a cien metros del monumento Manco Cápac, vio a un sujeto que se encontraba entre las rocas, en actitud sospechosa, el cual corrió con rumbo desconocido al verse descubierto.

Una vez en el cerro, los agentes hallaron al depravado y a la menor, quienes se encontraban con los pantalones a la altura de las rodillas. En ese momento –contó uno de los intervinientes–gritó “¡Policía!“, a lo que la mejor respondió: “¡Auxilio, me están violando!“. Inmediatamente, el violador se subió los pantalones y trató de huir del lugar, saltado desde lo alto del cerro, pero metros más allá fue capturado por otro agente que se encontraba en la parte baja del cerro.

Tras la detención, el depravado, la agraviada y su enamorado (que yacía amarrado y con un trapo en la boca), fueron conducidos hasta la comisaría de Puno. Posteriormente, Llanos Alanoca, el enamorado de la víctima y el fiscal de turno, Rubén Darío Itme Mamani, quien estaba escoltado por varios agentes del orden, regresaron al cerro Huajsapata, en torno a las 21:00 horas, para llevar a cabo las diligencias y esclarecer los hechos.

En el lugar, el violador negó los cargos y dio varias versiones sobre el incidente. “Subí a orinar; solo subí a defecar; estaba buscando a mi sobrino“, decía.

BANDA
Cabe precisar que Llanos Alanoca integraría la banda “Los buitres de Huajsapata“, y que habría cometido semejante vejamen en complicidad de dos sujetos más, quienes provistos de un objeto punzocortante (cuchillo) amenazaron a la pareja para luego dar rienda suelta a sus bajos instintos.

Tras culminar las pericias, el depravado fue devuelto a la carceleta de la comisaría, lugar donde permaneció durante esa noche. En la víspera, fue llevado hasta las instalaciones del Departamento de Investigación Criminal (Depincri), para continuar con la investigaciones del caso.