Los Andes

En lo que va del año, la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (DEVIDA), viene incrementando mil 039 hectáreas de cultivos de café, cacao y otros cultivos alternativos en beneficio de 3 mil 506 familias de 125 sectores de los Valles de Tambopata e Inambari. El objetivo es mejorar las condiciones económicas, sociales y ambientales.

Para ampliar los cultivos alternativos se produce y distribuye más de 3 millones 127 mil plántulas de cafeto y aproximadamente 179 mil plantones de cacao, además de otras especies de cítricos, plátano, guaba y variedades de forestales.

Con la finalidad de lograr las metas, DEVIDA transfirió más de 6 millones 800 mil nuevos soles a las municipalidades distritales de San Juan del Oro, Putina Punco y Alto Inambari de la provincia de Sandia para ejecutar tres proyectos productivos destinados a incrementar, mejorar la calidad y transformar el café y cacao que permita mejorar los ingresos económicos y la calidad de vida de los agricultores.

Un componente importante de los proyectos es la capacitación y fortalecimiento de las capacidades de los agricultores sobre el manejo técnico de los cultivos de café y cacao, post cosecha, comercialización, gestión empresarial, asociatividad, manejo y conservación de suelos, talleres en educación ambiental, capacitación en articulación de la cadena productiva de los cultivos alternativos y otros que permitirán desvincular a la población del cultivo ilícito.

Las capacitaciones benefician a 4 mil 290 agricultores y están acompañadas de 6 mil 211 visitas técnicas personalizadas, que permiten acompañar en el proceso productivo del café, cacao y otras especies como frutales, mejorando la calidad productiva que genera oportunidades de empleo, especialmente para la juventud y la población en situación de pobreza.

De igual modo se implementa 454 módulos de beneficio húmedo de café y 150 módulos demostrativos de beneficio ecológico de cacao con sus respectivos secaderos solares.

Entre otras acciones, también se instalan biohuertos familiares, módulos de crianza de cuyes y módulos de apícola que permitirá garantizar la seguridad alimentaria que repercute en la salud y educación de los niños y niñas de las zonas vulnerables.

Todas estas acciones se desarrollan en el marco de la Estrategia Nacional de Lucha Contra las Drogas, que permite generar nuevos proyectos productivos como la titulación de tierras, mantenimiento y apertura de vías vecinales que permitirá ampliar la conectividad y de servicios comerciales que sean sostenibles y participativos, orientados al desarrollo económico para prevenir la expansión de los cultivos de la hoja de coca con fines ilícitos.