Los Andes

Con su sonrisa habitual, Daniel Tapia Nelson lustraba ayer los zapatos de sus eventuales clientes, consciente de que para él no existen los feriados. “Hoy es un día como cualquiera. Trabajo por mí, a pesar del maltrato de algunos�, explicó, sin inmutarse en ningún momento.

Allí, a una cuadra del Mercado Central, donde diariamente ofrece sus servicios, él era la prueba irrefutable de que para muchas personas en el país, y quizás con más incidencia en la región Puno, no existe el “Día del Trabajador�, que se conmemora cada 01 de mayo.

Lo mismo que la comerciante Candelaria Locumbe, quien prepara y vende comida en este centro de abastos, a fin de procurarse los ingresos que le permitan vivir el día a día y, al mismo tiempo, le permitan sacar a su familia adelante.

“Siempre hace falta algo de dinero; tengo 4 hijos y debo trabajar por ellos. Ni en el Día de la Madre descanso�, afirma, confirmando así que este grueso sector de la población regional, que se concentra más en la ciudad de Juliaca (por su demografía), no cesa casi nunca en sus actividades.

Lo mismo ratifica Prudencio Ramos Canaza, el conocido canillita que tiene su puesto de venta en la plaza de armas de la ciudad de Puno, que siendo oriundo de Arapa (Azángaro), tiene ya 52 años vendiendo periódicos, ininterrumpidamente. “Siempre debo andar contento y bromeando; mi frase es: ‘¡Ya llegué, ya llegué, ¡aplausos!’. Así la gente se ríe y les levanto la moral�, apunta.

Estos ejemplos son solamente unos cuantos de los muchos que existen en la región, donde el problema del subempleo, de acuerdo a algunos especialistas, no ha mejorado en los últimos 12 años.

Cabe indicar, finalmente, que el 01 de mayo se celebra el Día del Trabajador a raíz de una jornada de movilización en el año l886, cuando centenares de obreros fueron reprimidos.