Los Andes

Como un hecho histórico para la población huancaneña fue tomada la ceremonia especial de instalación de la Sala Mixta Descentralizada Permanente de Huancané e itinerante en Azángaro, en donde se distinguió al congresista Mariano Portugal por gestionar dicho logro.

La ceremonia inició a las once de la mañana, con una celebración eucarística en el Templo Santiago Apóstol y con el acto ritual andino de respeto a la “Pachamama�, esta última realizada en el frontis de la sede judicial de Huancané, lugar donde se desarrolló todo el acto protocolar.

Todo inició con la lectura de la resolución del Consejo Ejecutivo Nro. 075-2015, que resuelve convertir a la Sala Mixta Transitoria de Huancané, desde del 1 de marzo del 2015, en Sala Mixta Descentralizada Permanente de Huancané e itinerante en Azángaro.

Luego de ello, hizo su intervención el congresista de la República Mariano Portugal Catacora, quien señaló que con la conformación de esta sala las poblaciones de Huancané, Moho, Putina, Sandia y Azángaro, estarán más cerca de la justicia.

“Mi obligación es trabajar por el pueblo y cuando tomamos conocimiento de que a esta Sala se la querían llevar, hemos trabajado conjuntamente�, precisó, reconociendo la labor del actual presidente de la Corte Superior de Justicia de Puno, Hernán Layme, y de su antecesor, Percy Lozada.

A su turno, el presidente de la Corte Superior de Justicia de Puno, Hernán Layme Yépez, manifestó que la Sala Mixta Descentralizada Permanente de Huancané, se hizo realidad gracias al apoyo de las autoridades locales, regionales, nacionales y de la misma población.

CONDECORACIÓN

El presidente de la CSJP, Hernán Layme, dijo que este hecho marca un hito histórico: “es un antes y un después de lo que significa la administración de justicia; este es un trabajo esforzado junto al doctor Mariano Portugal Catacora, a quien agradecemos infinitamente la deferencia que ha tenido en Lima para que esto se haga realidad�.

De otro lado, el alcalde de la Municipalidad Provincial de Huancané, Efraín Vilca Callata, como una forma de retribución, le entregó las llaves de la ciudad por haber apoyado a la descentralización de la justicia.