Los Andes

Dirigentes calceteros dieron plazo a la policía para que solucione el problema de la inseguridad.

Más allá de los disturbios y de la declaratoria de emergencia en la provincia de San Román, la paralización que emprendieron los pobladores de la ciudad de Juliaca en contra de la inseguridad ciudadana fue contundente.

No obstante esto, los resultados no fueron los esperados. Y es que las autoridades locales, regionales y nacionales no solo no se pronunciaron sobre la problemática en esta parte del país, sino que decidieron –prácticamente– reprimirla con la declaratoria de emergencia.

El ministro del Interior, Carlos Basombrío Iglesias, fue quien más abiertamente dejó de lado los reclamos de la población calcetera, al señalar que el Gobierno no permitirá más situaciones de violencia en esta parte del país, toda vez que se dañó la propiedad pública y privada durante las primeras horas de protesta.

Tal vez para atenuar ello, el jefe de la Región Policial Puno, general PNP Roger Tello Ramírez, dijo que el estado de emergencia en la provincia de San Román servirá para realizar patrullajes e intervenir bares y cantinas clandestinas, a fin de detener a los delincuentes. En 30 días, dijo, tratará de solucionar la inseguridad ciudadana.

En tanto, el día de hoy se desarrollará una reunión en el municipio de San Román (15:00 horas), donde supuestamente participarán las autoridades locales y regionales, así como los congresistas por Puno y los dirigentes de la ciudad de Juliaca.

MOVILIZACIONES
Durante los dos días de paralización, cientos de manifestantes recorrieron las principales arterias de la ciudad. Unos incurriendo en actos cuasi vandálicos (destruyendo locales nocturnos e incluso humildes tiendas) y otros exigiendo, en las instalaciones del INPE y el Ministerio Público, que atiendan sus pedidos.

En la víspera, tras conocer la declaratoria de emergencia, los dirigentes tuvieron una reunión en el Centro Comercial Nro 2, donde participó el jefe de la Región Policial Puno, Roger Tello; luego se concentraron en la plaza de armas de Juliaca, donde improvisaron un mitin.

Allí, el dirigente Jorge Chávez Checa, vicepresidente del Comité de Lucha del Paro en Juliaca, manifestó que las movilizaciones continuarán de forma pacífica, y que dieron un plazo de 30 días para ver si el problema se soluciona; de no ser así, aclaró, realizarán otra medida semejante los primeros días de enero del próximo año.

SAQUEOS Y MUERTE
Fuentes policiales informaron que aproximadamente 54 locales fueron afectados por los manifestantes, entre bares, cantinas, discotecas, etc., la mayoría de los cuales fueron saqueados por los manifestantes. Las pérdidas económicas de estos ataques, según se supo, ascenderían en total a más de 255 mil soles.

Asimismo, se informó que durante el primer día de la paralización falleció una persona, la cual fue hallada en el distrito de Caracoto. Los pobladores del lugar denunciaron que sujetos desconocidos habrían abandonado el cadáver del varón la madrugada de ayer.