Con participación de decenas de danzarines, la agrupación “Los Machuaychas” y la Asociación de Tokoros y Pinkillos “Los Chiñipilcos”, celebraron ayer la Qashwa de San Sebastián, o el “Carnaval Chico”, considerado Patrimonio Cultural de la Nación.
Los danzarines se reunieron desde tempranas horas en los cerros Huaynarroque y Calvario, donde con los 21 camaretazos y las Misas de Alba se dio inicio a esta tradicional actividad. El escenario, como era de esperarse, estaba adornado para la ocasión.
“Estamos celebrando una fecha tradicional, que tiene que ver también con el recibimiento de los primeros frutos de la siembra o cultivos”, señaló Sadoc Salazar Mamani, miembro de la asociación Los Chiñipilcos.
Por su parte, Darío Pilco, integrante de la agrupación Los Machuaychas, recordó la división de ambas organizaciones, allá por el año 1950, cuando incluso se produjeron enfrentamientos en los que tuvo que intervenir la policía. Acotó que ello ya pasó y hoy se tratan como hermanos.
En su alocución, el alcalde de la Municipalidad Provincial de San Román, David Sucacahua Yucra, tras la visita de ambos grupos, señaló que esta fecha debe ser de reflexión, a fin de mejorar el aspecto de la ciudad, con la participación de todos los actores.
Cabe indicar que en el año 2011 esta danza fue catalogada Patrimonio Cultural de la Nación, pues refleja la rica y compleja historia de Puno, a través de su tradición oral, música, organización festiva y coreografía.
Del mismo modo, es menester precisar que esta celebración se cumple también en otras zonas de la ciudad de Juliaca, además de distritos, departamentos y el país. En el caso del nuevo distrito de San Miguel, también danzaron al compás del tokoro y el pinquillo.
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