Una bebé de tan solo dos meses de edad murió asfixiada con la leche de su madre. El lamentable hecho se suscitó ayer en la mañana, en el barrio 28 de Julio de la ciudad de Puno.
Según fuentes policiales, aproximadamente a las 5:20 horas, los padres de la menor de iniciales A.A.Q.B. alertaron a los efectivos del orden, refiriendo que su hija necesitaba ayuda.
Fue así que los policías acudieron a su vivienda, en el jirón Conima, y de inmediato trasladaron a la menor hasta la posta José Antonio Encinas. Debido a que este establecimiento estaba cerrado, la evacuaron hasta el área de emergencias del hospital regional de Puno, donde los galenos de turno solo certificaron su deceso.
Consecuentemente, el cuerpo de la infanta tuvo que ser internado en la morgue de dicho nosocomio. Según se supo por parte del señor Gerónimo, padre de la difunta, un día antes la menor había sido llevada a la posta, donde recibió cuatro vacunas como parte de sus controles.
Tras realizar la necropsia de ley, cuyo resultado fue muerte por asfixia por aspiración de contenido, los padres retiraron el cuerpo de su menor hija de la morgue, para trasladarla hasta el distrito de Paucarcolla, lugar donde hoy será enterrada.
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