Como un baldazo de agua fría le cayó al país la repentina muerte de Alan Gabriel Ludwig García Pérez, dos veces presidente de la República, la mañana de ayer.
Autoridades y pobladores, inicialmente, no creían lo ocurrido en el mismo momento en que se realizaba el allanamiento de la vivienda del exmandatario, en el marco de las investigaciones del caso Lava Jato.
No obstante, autoridades y dirigentes de la ciudad de Juliaca solicitaron que se continúe con las investigaciones por los presuntos actos de corrupción ocurridos en sus dos periodos de gobierno (1985 – 1990 y 2006 – 2011), especialmente en el último.
Con las lamentaciones y condolencias de rigor a la familia doliente, reconocieron que hasta las 10:00 horas de ayer creían que García Pérez se salvaría del disparo que él mismo se infligió en la sien, aparentemente para evitar ser detenido.
Sin embargo, tras oficializarse el deceso del ex Jefe de Estado, por intermedio de las autoridades médicas del hospital José Casimiro Ulloa, donde estaba internado, el panorama cambió totalmente, haciendo del tema la “comidilla” del día.
VISITAS A JULIACA
Los últimos arribos de Alan García a la ciudad de Juliaca fueron tres. En el 2013 llegó a la Ciudad de los Vientos, a fin de visitar al ahora desaparecido Víctor Urviola Garrido, considerando su histórica militancia aprista.
También lo hizo en el proceso electoral del 2014 (elecciones regionales y municipales) y en la campaña política nacional del 2016.
REPRESENTANTES
La familia Bernal Salas es la representante del partido aprista a nivel de la región y, particularmente, de la provincia de San Román. María Antonieta Morales fue subprefecta del partido en el segundo mandato de Alan García Pérez.
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