Por: Gorki Maquera
Puno. Alguna vez, uno de los mejores boxeadores de todos los tiempos, Muhammad Alí, mencionó que odió cada minuto de entrenamiento, pero se dijo a sí mismo: “No abandones. Sufre ahora y vive el resto de tu vida como un campeón”.
La huella que algunos han dejado son tan profundas que no se pueden olvidar, pero otros fueron olvidados por el paso del tiempo, pero a los que la familia, amigos, recuerdan más que los ciudadanos de pie.
BOXEADOR
En la historia del deporte puneño, se enarbola la figura del legendario Genaro Iberos Pineda, subcampeón nacional de boxeo, quien mandó a la lona a varios pugilistas del entorno nacional.
Nació el 9 de julio de 1955 en el barrio Huáscar de la ciudad de Puno y desde niño abrazó el deporte de las “narices chatas”, patentado por los triunfos obtenidos en torneos escolares en representación del Glorioso Colegio Nacional “San Carlos”. En esa época cumplía 15 años.
A inicios de la década de los 70 fortaleció el club “Guantes de Oro”, integrado por sus hermanos René y Oswaldo Pineda Iberos. A este grupo se sumaron Moisés Tito Larico (Q.E.P.D.) y Juan Chambilla.
A nivel distrital, dieron solidez al boxeo con elementos de relevancia como José Ángel Calizaya, Eulogio Pineda, Héctor Calizaya. Ellos tuvieron la orientación del otrora campeón Dionisio Alencastre Vizcarra, entre otros valores.
Genaro Iberos y la pléyade de pugilistas formaron una sociedad fraterna para confrontar en peleas de gran envergadura. En 1972 se corona Campeón Regional tras derrotar al juliaqueño Héctor Gómez.
Previamente, en 1971 ostentó el subcampeonato nacional, en cuyo certamen logró derrotar a Horacio Mitzuvich por knock-out (K.O.) técnico.

AL HOSPITAL
Fue cuando conectó un certero derechazo a la mandíbula de Edilberto Lazo, quien cayó pesadamente al entarimado. La velada juliaqueña casi se convirtió en una tragedia, ya que el contrincante no daba señales de vida.
El boxeador Lazo fue evacuado al hospital más cercano y menos mal que logró recuperarse, reconociendo la habilidad de Genaro, que fue todo un bombardero con sus manos.
GRAN PELEA
Tuvo la ocasión de confrontar con Arturo Manrique, quien fuera Campeón Nacional y
Panamericano desde el año 70 al 72. La diferencia fue escasa para caer derrotado y así sellar el subtítulo nacional. En esa época se tuvo como presidente de la Liga de Boxeo al dirigente Alberto Aza Arias.
MARATÓNICAS VELADAS
Desde 1973 a 1977, los luchadores puneños fueron a competir a varios certámenes regionales e internacionales. Genaro Iberos, junto a Moisés Tito, Juan Chambilla, José Ángel Calizaya y Juan Mollocondo estuvieron preparados para todo certamen.
Posteriormente, surgió en peso pesado Andrés Parisuaña, sin pasar por inadvertido a David Calizaya y Wily Zegarra. Hubieron luchas constantes en el coliseo del jirón Titicaca de Puno, complejo “Miguel Ramos” de Juliaca, estadio Torres Belón y los cuadriláteros de ciudad de La Paz.
NOS DEJÓ:
Un vacío enorme dejó a su familia, tras partir a la eternidad. La vida de Genaro Iberos se apagó el 25 de diciembre del año 2013, en una amarga Navidad para todo su entorno.
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