Doce personas murieron y cuatro están desaparecidas tras el paso de la tormenta Gloria por el este de España entre el domingo y el jueves, anunció el jefe de gobierno Pedro Sánchez, que atribuyó el fenómeno al cambio climático.
Sánchez menciono que, “esta es la séptima gran tormenta que tenemos desde que empezó la temporada de tormentas y cada vez son más devastadoras”, añadió para señalar que España está particularmente expuesta a los efectos del cambio climático.
Según comunicó el ayuntamiento de Barcelona, “Las nueve playas de la ciudad perdieron el 30% de arena, y las olas superaron los seis metros de altura”. También dieron a conocer la primera evaluación de los destrozos, que alcanzaría 12,5 millones de euros en la segunda ciudad española.
En cuanto a la región de Valencia (este), el sindicato de jóvenes agricultores Asaja estimó en 62,6 millones de euros las pérdidas por el temporal para el sector agrícola.
Por eso, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, pidió al Estado que declarara la ciudad “zona catastrófica”.
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