La presencia de gran cantidad de turistas nacionales e internacionales en nuestra región, los cuales arribaban al altiplano a espectar la Festividad de la Candelaria entre el 1 y el 15 de febrero, es algo que se extraña en estos días.
Como se sabe, la covid-19 obligó a suspender las actividades festivas de este mes, por lo que la ausencia de visitantes es notoria, al tiempo que hay incertidumbre respecto a lo que suceda en años venideros.
De acuerdo con el registro de la Dirección Regional de Comercio Exterior y Turismo (Dircetur) de Puno, en la Festividad de la Candelaria 2020, la región recepcionó a 17 mil 958 turistas nacionales y 5 mil 894 turistas internacionales.
“En este mes se generaba el turismo, pero por las restricciones (de la covid-19) todo se ve afectado… La Dircetur ayudaba a difundir la festividad y a velar por la seguridad de los turistas”, sostuvo Hítler Ramos, titular de la entidad.
Asimismo, sostuvo que pese a la suspensión de las actividades, se ha planteado seguir realizando trabajos de promoción, como capacitaciones a diversos sectores, aunque todo de manera virtual.
Precisó que el sector más afectado es el de artesanía y turismo. Durante este mes, acotó, los turistas aprovechaban para visitar los atractivos turísticos de la región, como Los Uros, Sillustani, Amantaní, Taquile y otros.
Sostuvo que de esta manera se vendían artesanías elaboradas por manos puneñas, lo cual generaba un ingreso importante a este sector, que también en este mes realizaba ferias de artesanos en la Ciudad Lacustre.
Respecto a la reactivación del turismo, Ramos mencionó que la solicitud para recibir el sello Safe Travels, otorgado por el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC en inglés), continúa en trámite.
“No sabemos si vamos a tener una tercera ola, pero nosotros continuamos trabajando en reactivar el sector turismo con la obtención del sello y con todas las medidas de bioseguridad”, dijo el funcionario.
Finalmente, ante la suspensión de la Candelaria, declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, pidió a la población mantener el cuidado respectivo, ya que dos trabajadores de la Dircetur fallecieron contagiados con el mortal virus.
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