Gobernador regional de Puno huyó de reunión en Juliaca, ante cuestionamiento que recibía
En medio de una acalorada discusión, el gobernador provisional de Puno, Agustín Luque Chayña, abandonó el diálogo con los dirigentes de la ciudad de Juliaca, en la víspera.
La autoridad regional, lejos de mostrar predisposición para solucionar o absolver los cuestionamientos respecto a la obra del hospital Materno Infantil de Juliaca, se mostró soberbio con el pueblo calcetero. De igual manera actuó el equipo técnico del Gobierno Regional de Puno (GRP).
Lo que desató la molestia general, fue que Luque solo haya querido firmar un acta en el que se comprometía a garantizar un presupuesto de más de 30 millones de soles para la infraestructura hospitalaria.
Los dirigentes exigían una resolución, cosa que el gobernador rechazó, para luego huir raudamente del estadio Guillermo Briceño Rosa Medina.
El gerente general del GRP, Octavio Quispe, intentó justificar esta actitud señalando que el problema se debe a los recortes presupuestales de parte del gobierno Central.
Ante ello, los dirigentes calceteros no descartaron emprender una medida de protesta contra la autoridad regional.
Finalmente, el consejero por la provincia de San Román, Isidro Pacohuanaco, se ratificó en señalar que la cúpula del gobernador regional sostiene la actitud de una organización criminal.
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Asumió el compromiso de incorporar 23 millones de soles el 2021 y 34 millones para el 2022 para la culminación de la obra Materno Infantil de la Ciudad Calcetera
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