Puno. Para el vicegobernador Germán Alejo Apaza, la deficiente gestión de Agustín Luque como autoridad obedece a que sus “llunk’us” (vocablo aimara que significa “sobones”), manejan a su antojo el Gobierno Regional de Puno. Ello se reflejaría en el bajo gasto presupuestal y otras deficiencias.
Alejo, considera que al gobernador le falta liderazgo y no impone autoridad ante algunos gerentes, funcionarios e incluso residentes de obra.
Esto se estaría traduciendo en la no supervisión de obras, conflictos entre diferentes oficinas regionales. El no poder orden, añadió, repercutiría en que varios proyectos queden trabados.
Finalmente, a fin de superar la brecha en vacunación y demás aspectos que hunden su gestión, el vicegobernador sugirió que Luque elabore un flujograma para controlar el cumplimiento de plazos en adquisición de bienes, firma de contratos y ejecución de proyectos.
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