Cuando se cerró el Congreso de la República en el 2019 y se eligió a uno nuevo en el 2020, se esperaba que se reivindique a este deslegitimado poder del Estado; sin embargo, fue peor. Al culminar su gestión, no solo incumplieron sus promesas de campaña, sino que también se ganaron el calificativo de congresistas golpistas.
Si hay algo que el saliente Congreso ha logrado consolidar, es su rechazo y deslegitimación ante la ciudadanía. El de Puno, es otro grupo parlamentario más que se despide sin pena ni gloria, incumpliendo sus promesas de campaña, como el de reducir sus remuneraciones.
Durante la pandemia, en lugar de coadyuvar a mitigar la problemática, solo contribuyeron a entorpecer las acciones del sector salud para hacerle frente a la covid-19. Muestra de ello es que incluso presentaron proyectos de ley para autorizar el uso del dióxido de cloro para el tratamiento de este mal, a pesar que no ha sido validado científicamente.
Mención aparte merece el parlamentario Orlado Arapa Roque, quien fue ridiculizado a nivel nacional e internacional por decir que el gobierno de Martín Vizcarra diseminaba el coronavirus empleando avionetas. Mientras perdía el tiempo en cuestiones conspiranoicas negacionistas, muchas personas morían por falta de oxígeno y camas de UCI.
Sin duda, el mayor demérito y acción más nefasta del Congreso que ya se va, fue haber respaldado el golpe de estado y la designación de Manuel Merino como presidente de facto. Asimismo, se pretendió legitimar la elección de miembros del Tribunal Constitucional, pese a todas las irregularidades en el proceso.
Desempeño
Si bien el periodo que tuvieron fue corto, no estuvieron a la altura de las expectativas de la población. Solo en Puno, no se logró concretar ninguna iniciativa legislativa de impacto; solo hubo declaratorias de interés nacional sobre la construcción de alguna obra, de alguna fecha festiva o un monumento.
Si la productividad se basara en el número de proyectos de ley presentados, varios de ellos controversiales, la legisladora Yessica Apaza Quispe ocuparía el primer lugar, habiendo presentado un total de 90, doce de ellos promulgados, tres observados y dos en dictamen.
Orlando Arapa presentó 49, de los cuales 7 se promulgaron, 2 se observaron y 2 fueron rechazados y/o retirados. Rubén Ramos Zapana es autor de un total de 37, 3 promulgados, 1 observado, 4 con dictamen y 3 no fueron tomados en cuenta.
Penúltimo está el novísimo ministro de la producción, Yván Quispe Apaza, quien presentó 28 proyectos de ley, 4 de ellos promulgados. En la cola se encuentra Irene Carcausto Huanca, que tiene 24 iniciativas legislativas de su autoría, 4 de ellas promulgadas, 1 observada, otras 4 con dictamen y 3 rechazadas.
Cabe señalar que gran parte de sus proyectos se aprobaron en sus comisiones. Algunas propuestas controvertidas, y otras que requieren mayor análisis o consenso, tienen fecha de vencimiento, por lo que urge que sus sucesores le hagan seguimiento.
De las acciones que adoptaron en conjunto, resucitar a la desaparecida Universidad Andina Néstor Cáceres Velásquez (UANCV), contraviniendo lo que manda la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu), fue su bandera de lucha.
Evaluación
Para el politólogo Paulo César Vilca Arpasi, el desempeño congresal no debe definirse únicamente en el número de proyectos de ley que presenten los parlamentarios, sino en cuál es la calidad y el impacto de los mismos.
Considera que otro aspecto importante a tomar en cuenta es su labor fiscalizadora, así como el control político que ejerce para hacer un contrapeso con el Ejecutivo. Esta función es la que habrían descuidado, en cierta forma.
Recordó que otra de sus funciones es la de representación, lo que da más legitimidad a su labor. Ello va más allá de reunirse con sus colegas, dirigentes u otros grupos sociales, sino que implica llevar la voz del pueblo en temas políticos y hacer la agenda en favor de ellos.
Perfil
En términos generales, el especialista considera que este parlamento fue muy deficitario, siendo un problema de la democracia y del mismo sistema político que tiene estos resultados. Su inexperiencia política y la falta de cohesión partidaria o de bancada son factores que influyen en su desempeño.
Señala que este nuevo congreso, ante la fragilidad de este gobierno, tiene la oportunidad de cumplir un mejor rol; sin embargo, hay ciertas características que se repiten y dan cuenta que no habrá diferencias sustanciales. A pesar de ello, espera que puedan trabajar unificadamente en favor de la población.
Comentario sobre post