Los Andes

Uno de los grandes problemas actuales es cómo enfrentarán los retos, las coyunturas sociales, etc., durante el siglo XXI, los que hoy son estudiantes. El actual sistema se diseñó hace 150 años y apenas ha cambiado, mientras que la sociedad lo ha hecho, y mucho.

Actualmente existen tres grandes frentes: El cambio en el modelo económico; un nuevo uso de los recursos energéticos que disponemos y una lucha por el medioambiente; y la cohesión social y la diversidad. Son retos creados por adultos de ayer y de hoy, que tendrán que ser resueltos por los actuales niños.

Además indican los expertos en educación mundial, como Sir K. Robinson, R. Gerver, J. Rivero, Cristobal Cobo, Jhon Moravec y otros, que la preparación de los alumnos debería basarse en la creatividad, innovación, autoconfianza e independencia; deben ser personas comunicativas y con visión de futuro. Deben indagar y cuestionárselo todo. El sistema tradicional enseña certezas, conocimientos y reglas. Es un aprendizaje previsible; el reto está en formar a futuros adultos capaces de gestionar la incertidumbre; no debemos olvidar las asignaturas tradicionales, pero hay que ofrecer mucho más a los alumnos.

Otro asunto importante que derivan los expertos es que todos debemos aprender lo mismo y obtener los mismos resultados en la misma velocidad y forma; los seres humanos somos complejos, ahora la responsabilidad moral de un educador es descubrir los intereses y capacidades de cada niño; obligamos a que todos sean iguales, impedimos que cada uno florezca según sus posibilidades. Sí, genera mediocridad.

Otro acápite importante que detallan los expertos es que todos deberíamos entender que el nuevo paradigma educativo es que toda la comunidad es responsable de la educación: Escuelas, padres y empresas. No podemos esperar a la universidad para formar niños con las habilidades necesarias para el siglo XXI. Las empresas deben decir qué se necesita, y esto debe ser aplicado desde las escuelas de primaria.

Sarín menciona que los niños nos ganan en uso de tecnologías; los adultos deberíamos analizar ese hecho, la tecnología nos ayuda a ser más creativos y usar la inteligencia de otra forma, las redes sociales son una herramienta fantástica para todos. Hay que enseñar a usar la red de forma responsable; la revolución digital nos hace más cercanos entre nosotros y es vital asegurarse que los niños disfrutan del contacto humano. Tarea de los padres y de los profesores, cuidar la generación del siglo XXI que van generar nacimientos para el siglo XXII, ellos nacen pensadores críticos, el reto es enseñarles sin anularlos.

Termino mencionando que el Internet es una gran herramienta de libertad, pensamiento y comunicación. El uso que hacen en el mundo de las redes sociales demuestra la vital importancia de lo que podemos generar en el próximo siglo XXI.