En los últimos días, el gobernador regional de Puno fue duramente cuestionado por diversos sectores, incluido el Consejo Regional, cuyos miembros exigen establecer el diálogo. En ese sentido, es necesario recordar la trayectoria de los funcionarios que rodean a Agustín Luque.
Olinda Pacheco, por ejemplo, fue funcionaria en la gestión del exalcalde de Puno, Iván Flores. Ella fue jefe de almacén central y tenía funciones en el tema de adquisiciones, además de dar las conformidades de los mismos.
Otro funcionario es Josué Milton Quispe Gutiérrez, quien actualmente se encarga de la oficina de abastecimientos de la región. Él también fue funcionario en el área de abastecimientos en la gestión de Flores y dejó de trabajar por sanción de Contraloría. Pese a ello, fue miembro del Comité de licitación del hospital regional MNB Puno.
Jhon Martinez Molina, asesor legal en la gestión de Flores, ahora asesor legal de la región, a pesar de que estuvo involucrado en el encarcelamiento de Flores por 100 mil soles; Santiago Molina, actual procurador regional, también fue funcionario en la gestión de Flores.
Otros casos son los de Isaac Quispe León, ahora gerente de desarrollo social; Diomedes Mamani Mamani, actual gerente de infraestructura de la región; Arturo Mamani Pandia, hoy titular de la Dirección Regional Agraria de Puno; y Willy Gomez, ahora es consultor de región por Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
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