Años atrás, Arequipa era conocida como una ciudad de ambiente fresco y aire puro.
Los médicos recomendaban que las personas con problemas respiratorios, vengan aquí para aliviar sus dolencias.
Pero esos tiempos han pasado. Ahora, nuestra ciudad dejó de ser blanca debido a la contaminación gris que afecta a la población.
Esta situación incrementa los casos de asma de forma considerable y preocupante. Y esta enfermedad no se debe tomar a la ligera.
En niños y abuelitos
La Gerencia Regional de Salud (Gersa) reportó un total de 2,611 casos de asma en niños menores de 5 años, y 5,706 casos en adultos mayores, en toda la región de Arequipa, desde que inició el año 2019.
El director del Área de Epidemiología de la Gersa, Jorge Velarde Larico, señaló que de las cifras antes mencionadas, en la ciudad de Arequipa se registran 2,200 casos en niños y 5,220 en personas de avanzada edad.
Es decir, casi el 75 % de las personas que sufren asma vive en nuestra ciudad.
“En esta última semana fueron 363 reportes de personas que padecen dicha enfermedad, el número de casos se incrementó en un 38 % con respecto al año pasado”, dice el especialista.
“La mayoría de personas que la sufren, es por causa de la enorme contaminación ambiental que existe, sobre todo de los vehículos que emiten gases dañinos”, remarcó Velarde.
Clima gris
Arequipa respira un aire tóxico. El director regional de Salud Ambiental de la Gersa, Zacarías Madariaga Coaquira, advirtió que la contaminación del aire en la ciudad aumentó en 30% durante los últimos cinco meses. Y el parque automotor es el principal causante.
Según datos de la Asociación Automotriz del Perú (APP), existe 1 vehículo por cada 8 habitantes en Arequipa. Y son alrededor de 193,268 unidades móviles en el parque automotor local, sin considerar que la cifra se elevará hasta fin de año por los vehículos nuevos que ingresen a circular.
Según los Estándares de Calidad del Aire (ECA), la contaminación del aire no debe superar los 100 microgramos por metro cúbico (m3) de material particulado PM-10.
Al respecto, Madariaga señala que las avenidas con mayor concentración vehicular y polución son Ejército, Juan de la Torre, La Marina, Goyeneche y Jorge Chávez, donde se registran hasta 125 microgramos por m3.
“Una persona lo puede percibir, estar 20 minutos en contacto con el humo de los carros, le provoca tos. En este aire se concentran metales pesados tóxicos como níquel, plomo y mercurio, además de residuos producidos por la minería”, explicó Madariaga.
Prevención
Las personas más vulnerables siempre serán los niños y adultos mayores, por lo que el cuidado debe ser mayor ante esta amenaza.
Velarde subraya que el asma es una enfermedad crónica, que cualquier persona la puede adquirir y que ahora con las bajas temperaturas, una simple gripe o tos puede convertirse en un cuadro asmático agudo.
Según el especialista, este mal no tiene una cura inmediata, no existen vacunas para remediarlo como sí ocurre con la neumonía, y su tratamiento es de largo aliento y sobre todo, de mucho cuidado.
“Lo más preocupante son las crisis agudas asmáticas que durante episodios cortos pero críticos, la persona sufre de insuficiencia respiratoria, se contraen los bronquios y el ingreso del aire es imposible y puedes morir por asfixia”, advierte Velarde.
El especialista señala que estas crisis asmáticas duran entre 7 a 10 días, y en niños es más peligroso porque deben ser internados en el hospital con respirador artificial para que ingrese el aire, ante estas crisis repentinas e imprevistas.
Se recomienda un tratamiento con inhaladores y antibióticos, una vida sana alejada de sitios cerrados y evitar contacto con personas que sufran alguna infección respiratoria.
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