Karla G. C. no puede caminar a causa de las heridas provocadas por ocho perdigones que le disparó un policía.
Las piernas de la joven madre de 29 años, aún sangran.
Ella participó en las protestas contra el presidente Martín Vizcarra, registradas la tarde del miércoles en el centro de la ciudad.
Estuvo parada entre las calles Melgar y Jerusalén, cuando escuchó disparos y empezó a correr mientras la gente se dispersaba.
De pronto, sintió que un cuetón explotó en su pierna y al tocarse tenía un hueco en el pantalón.
Ayudada por sus familiares, tomó un taxi hasta el hospital Goyeneche, luego de revisarse en el baño.
Se sorprendió al ver que tenía siete orificios en la pierna derecha y uno en la izquierda. Las heridas fueron ocasionadas por los perdigones que le disparó la policía.
Decidió retirarse del nosocomio y fue a una radio local para denunciar lo sucedido.
Minutos después, en la comisaría de Santa Marta, interpuso denuncia por el presunto delito de lesiones.
Karla G. C. pide a la policía que se identifique a los agentes que dispararon, causándole un severo daño físico.
El médico legista determinó 10 días de descanso. No podrá trabajar para mantener a su hijo.
“No teníamos armas, me dispararon y los perdigones me provocaron heridas profundas que ahora no me dejan caminar”, denunció.
JUSTIFICACIÓN
El jefe de la Región Policial de Arequipa, coronel Julio Brito Gonzales, señaló que los agentes se defendieron de ataques de manifestantes.
Indicó que los protestantes usaron herramientas que sacaron de la obra de la calle Jerusalén. Dos efectivos policiales resultaron heridos.
Brito aclaró que la policía no atacó a nadie y que los efectivos se resguardaron con equipos permitidos en legítima defensa, como los escudos y armas que disparan perdigones.
“Todos los agentes están preparados para actuar, se usa la fuerza de manera progresiva”, justificó Brito Gonzales.
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