Wilma Arizapana: “Avenida Simón Bolívar fue un capricho”

Alexandra Ramos

A dos meses de su inicio, la obra de la avenida Simón Bolívar no solo trajo molestias a vecinos y comerciantes durante su ejecución, sino también la preocupación de muchos, quienes se preguntan de dónde sale el presupuesto (8 millones 414 mil soles), y si ello se contempla en el plan de trabajo del alcalde Martín Ticona.

PRESUPUESTO

El gerente de Planificación y Presupuesto de la Municipalidad Provincial de Puno, Jaime López Mamani, dijo que esta obra se ejecutó por decisión política, por lo que el presupuesto proviene de saldos de balance, es decir, montos que quedaron como saldo del año anterior, además de créditos suplementarios.

Según López, el primer monto entregado a la obra, es de 4 millones de soles, de los cuales, 1 millón es proveniente del canon y 3 del Fondo de Compensación Municipal (Foncomun).

Indicó además que no puede desembolsar el resto si la obra se estanca, puesto que sería un obstáculo para el avance financiero, debido a que el tiempo límite de ejecución es de 7 meses, plazo que se vence el 31 de diciembre próximo.

REGIDORES

Sin embargo, el proyecto de mejoramiento no fue consultado ante el Concejo Municipal. Según la regidora Wilma Arizapana, “este es un capricho de la autoridad edil, Martín Ticona Maquera, y del gerente municipal, Fredy Vilcapaza”.

A su juicio, no era necesario otorgar el presupuesto de emergencia a las obras de la avenida Simón Bolívar y Plaza de Armas, debido a que la ciudad tiene mayores prioridades, tanto en los barrios Alto Tribunal como 4 de Noviembre.

“No han hecho un expediente técnico de cómo deberían trabajar. ¿Qué clase de ingenieros tenemos para que puedan perjudicar a los vecinos? El alcalde es el papá del pueblo, el que debe velar por la población, pero al contrario está actuando”, declaró.

Domingo Calisaya, también regidor, ratificó que la obra no fue consultada con el pleno del Concejo Municipal para su ejecución.