Por José Manuel Quispe Qquenta
Arequipa. Con apoyo de su papá, la joven Madeleine (22) se acercó la mañana de ayer hasta su local de votación en la institución educativa San Agustín, ubicada en el sector de Upis (Hunter), para cumplir con su deber cívico y elegir al próximo mandatario del Perú.
La joven ciudadana tiene una discapacidad motriz y psíquica. Pese a estas dificultades, no deja de participar de los procesos electorales desde que cumplió la mayoría de edad.
“Es la cuarta vez que asiste a sufragar. Ella es consciente de la importancia de sufragar y elegir a las autoridades”, indicó Cristóbal Apaza (51), padre de la joven Madeleine.
La señora Eusebia (59), también asistió durante las primeras horas del domingo hasta la institución educativa San Agustín para ejercer su derecho democrático.
En esta oportunidad tuvo que ser apoyada por sus hijos para trasladarse hasta su mesa de sufragio, debido a que sufrió la fractura de una de sus piernas días atrás.
“Hacer el trámite para la dispensa es muy engorroso y demora mucho. Mi mamá quiso también cumplir su derecho de elegir, es por eso que la trajimos a pesar de lo mal que está”, manifestó Esmeralda Mamani (28), hija de la señora Eusebia.
Estas dos ciudadanas dieron el ejemplo de puntualidad. Y es que, tras instalarse las mesas de sufragio a partir de las 07:00 horas de ayer en diferentes locales de votación de la ciudad de Arequipa, se percibió una mínima presencia de electores a comparación del proceso anterior de primera vuelta.
Se observó en diferentes distritos de Arequipa, que los primeros en asistir a sufragar, eran adultos mayores y personas con alguna discapacidad. Pasado el mediodía, ser observó una mayor cantidad de ciudadanos que asistieron a las urnas.
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