El gobernador regional, Rohel Sánchez, ayer no asistió a la reunión realizada en el municipio provincial que tenía como objetivo ver el tema de seguridad debido al incremento de la delincuencia que se ha dado en los últimos meses.
La excusa, según dio a conocer el alcalde de Cayma, Juan Carlos Linares, fue que no habría recibido la invitación formal vía documento.
“Hoy (ayer) que hablé con uno de sus asesores me dijo que recién le pasaron la voz ayer (martes) en horas de la noche por un WhatsApp. Yo espero que nos dejemos de tonteras”, remarcó al indicar que no se trata de buscar protagonismo de una u otra autoridad, sino de evaluar alternativas, ya sea la declaratoria de emergencia u otra que sirva para dar tranquilidad a la población arequipeña y deje de percibirse que la inseguridad va en aumento cada día más.
“Lo ideal sería que esté aquí, lo queremos escuchar, pero también que nos escuche a nosotros y tal vez en conjunto con el general de la Policía, Ministerio Público y Poder Judicial, hacer un rol de actividades para poder actuar, sino vamos a seguir en lo mismo”, indicó.
El burgomaestre dijo que lamentablemente cada vez que hay un asalto los pobladores piden que intervengan los alcaldes, pero ya escapa de sus manos poder actuar, pues hacen patrullaje integrado y otras acciones que básicamente son preventivas porque es lo que les corresponde. La competencia es de la Policía.
En la reunión de ayer estuvieron el alcalde provincial, Víctor Hugo Rivera y los burgomaestres de 9 distritos, así como la congresista María Agüero y representante de la Policía.
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