El maleficio le pasó factura al elenco ugartino. Y es que cinco futbolistas se encuentran seriamente lesionados y serían sensibles bajas para el domingo, cuando el equipo del pueblo enfrente al Credicoop San Román.
Alberto Vela sufrió un desgarro de 10 cm en el aductor; Alberth Ruiz padece de un esguince de segundo grado, y el arquero Job Angles aún no se recupera de su lesión en la cadera.
Por si esto fuera poco, se suma el mal de Cléver Portocarrero, que sufrió una contracción en el ligamento cruzado, y Alberth Araujo, que quedó inhabilitado momentáneamente.
Por otro lado, el estratega Jaime Carrión recibió el respaldo del presidente Daniel Marón e indicó que no existe culpabilidad ante una coyuntura donde prima la falta de individualidades, el carácter estructural y los factores económicos.
“A estas alturas, es difícil encontrar a un técnico que conozca de la emoción, psicología, conducta, técnica y los hábitos de los deportistas. Un entrenador requiere de por lo menos dos semanas para poder adaptarse al ambiente de un plantel”, indicó Marón, presidente de Ugarte.
En ese marco, pidieron el fiel aliento de los hinchas y aficionados, y que no se generen diatribas y provocaciones que desalienten al plantel.
En los últimos entrenamientos del club, se pudo apreciar entusiasmo entre los jugadores, quienes aseguraron que buscan recuperar el protagonismo en esta edición de la Copa Perú.
En los trabajos se pudo apreciar el despliegue de Palomino, quien proviene del Sport Boys del Callao y se desempeña como lateral derecho. De igual modo, se observó la labor de Karl Fernández, quien alternó en Carlos A. Manucci de Trujillo, como volante central.
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