Se recuerda los 165 años del nacimiento de Oscar wilde, genio de la literatura que dio vida a este clásico
Por: Darwin Moscoso Montoya
Al recordarse 165 años del nacimiento de Oscar Fingal O’Flahertie Wills Wilde, que era su nombre completo, queremos brindar un reconocimiento a este literato irlandés quien supo cautivar a varias generaciones con una de sus obras más reconocidas a nivel mundial.
Es el Retrato de Dorian Gray, su mayor éxito; ha cumplido 129 años desde su publicación, pero no ha perdido actualidad apesar del tiempo transcurrido. Son muchas generaciones que han leído esta obra y sigue siendo referente en la educación de nuestros estudiantes a los que se les inculca el hábito de la lectura a través de este texto.
El retrato de Dorian Gray nos reproduce la lucha interna que se da en muchas personas por no querer aceptarse como son, resistirse a los cambios y hacer todo lo posible para escapar de ese proceso natural de maduración que los va arrastrando a una pérdida paulatina de la consciencia y a ser críticos de sus propias decisiones y actos, creándoles así un gran problema existencial.
Desde el inicio de la novela se va notando el conflicto que genera el paso de los años en Dorian Gray. Es un conflicto que se ha presentado desde hace mucho tiempo en la existencia humana, y que con el transcurrir de los tiempos se ha hecho más agudo a raíz de que el ser humano toma mayor consciencia de sí mismo, y su rol e imagen que tiene en la sociedad.
Hay un miedo al transcurrir del tiempo y el consecuente envejecimiento, lo que termina en la desaparición de este mundo, haciendo que el ser humano considere su vida muy efímera y que debe vivirla a cabalidad, aprovechando cada momento, sin importar que se pueda cometer excesos, delitos, etc., para lo que debe renunciar a su vida, entregándose a estas banalidades sin importar las consecuencias.
Es el propio Dorian, sintiéndose impotente y en un momento de locura, que comienza a acuchillar su propio retrato. Al llegar sus criados lo hallan herido de las propias lesiones infligidas a su retrato, que está a su costado y que ha retomado al momento que fue pintado hace tiempo, en donde se nota la belleza de Dorian, mientras que el cuerpo que estaba al lado del cuadro era el de un viejo.
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