Las autoridades sanitarias chinas anunciaron el sábado la primera víctima mortal, un hombre de 61 años, de lo que se cree es una nueva cepa de la familia del SARS, que mató a cientos de personas hace una década.
Al menos 41 personas con síntomas parecidos a los de la neumonía han sido diagnosticadas hasta ahora con el nuevo virus en la ciudad de Wuhan, en el centro del país. Asimismo, otras siete se encuentran en estado grave, anunció la Comisión de Salud de la ciudad en un comunicado.
El brote ha generado alarma debido al vínculo con el Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS, en inglés), que provocó hace una década la muerte de 349 personas en China continental y otras 299 en Hong Kong, cuya economía se vio fuertemente afectada por el devastador impacto de la epidemia en el turismo.
Los científicos chinos que investigan este brote dijeron la semana pasada que creen que el patógeno era un tipo nuevo de coronavirus, una amplia familia que abarca desde la gripe común a enfermedades más importantes como el SARS. Asimismo, el virus encontrado en uno de los pacientes de Wuham tiene un 80% de similitudes con el SARS encontrado en murciélagos.
En una conferencia de prensa en Hong Kong, aseguraron que es pronto para concluir definitivamente que se trata de una cepa del SARS, antes de agregar que la ciudad debe ser vigilante.
Las autoridades hongkonesas han tomado una serie de medidas preventivas como incrementar la desinfección de trenes y aviones, y chequear a los pasajeros.
“Necesitamos estar en alerta ya que creemos que la epidemia seguirá desarrollándose”, dijo Wong Ka-hing, director del departamento del Centro de Protección de Salud.
Los habitantes de la ciudad están preocupados por el brote y a principios de semana habían agotado las existencias de máscaras en muchas farmacias locales.
Fuente: AFP
Comentario sobre post