Los Andes

Vivimos épocas de crisis capitalista global estructural, vivimos en una era de tolerancia, donde en el Perú, el de los grupos de poder, es mucho mas valioso proteger la mentira, que proclamar la verdad, vivimos una época donde actuar en función a principios, es una herejía condenable por la inquisición de los medios de comunicación de los amantes del dinero.

Navidad, propicia para una propuesta de oponernos a la mentira, una propuesta contra la moda de la corrupción, una propuesta de navegar contra la corriente neoliberal, una propuesta donde en cuestiones de conciencia, debemos como peruanos afirmarnos como una roca en éste suelo y subsuelo que es del Perú y no de las transnacionales, ni de quien lo sirve desde el gobierno.

Debemos los informales, los excluidos por los amantes del dinero, a que seamos estudiantes dedicados del tema de liderazgos creíbles para nuestro Perú, con la convicción de que ser un buen líder, no nos garantiza que podamos dejar un legado para los jóvenes y niños de la próxima generación, pero si nos dará una mejor oportunidad para hacerlo. Este es el reto de la izquierda.
Creación heroica del socialismo, significa un reto, una ley del legado, donde el verdadero éxito se mida por la sucesión, pues un legado que no incluya personas, no tiene ningún valor. Ello implica a líderes como Alberto Pizango, Wálter Aduviri, y Gregorio Santos, practicar el liderazgo transformacional, el cual debe provocar en el sector emergente informal, que las vidas de millones de peruanos de las comunidades andinas y selváticas, y migrantes provincianos sean cambiadas.

Actualmente, el modelo neoliberal sigue con Ollanta Humala, para ello es necesario precisar, que debido a la manipulación mediática, muchos peruanos se han convencido de que el respeto a la gobernabilidad y la democracia, significa volverse tímidos, callados, reservados, y finalmente manipulados. Montesinismo puro que puede repetirse con Ollanta y la cúpula de militares.

El problema radica que hemos confundido la palabra mansedumbre con debilidad. En esta navidad, es necesario reconocer nuestras debilidades frente a las potestades de este siglo, pero, es allí donde la fortaleza de cristianos, debe perfeccionarnos en nosotros, para mostrar un aplomo contrito de que es posible un mundo mejor, donde se cuide y se labre la tierra.

“Todos los que habían creído estaban juntos y tenían en común todas las cosas, y vendían sus propiedades y sus bienes, y lo repartían a todos, según las necesidades de cada uno�.

(Hechos 2: 44-45)
La ausencia de liderazgos creíbles moral y técnicamente, sigue siendo la característica de una agotada república, pues todo se sostiene o se destruye por causa de los liderazgos. Lo que expreso en éste artículo, es que mas que otro factor, el factor el liderazgo de ésta gran institución llamada Estado peruano y sus instituciones determinará su éxito o fracaso.

Formar liderazgos creíbles, debe ser un patrón consistente para los nacientes frentes y movimientos regionales del Perú, pues creación heroica con liderazgos creíbles para una nación, no es un llamamiento a las masas, sino a líderes para ellas, para liberar al pueblo con la guía de principios colectivos unitarios y amplios. Mensaje hoy, no procesado por las izquierdas en el Perú.
En ésta navidad el pueblo peruano, el nuevo proletariado emergente, mal llamado “informal� le está planteando a nuestra “experimentada� izquierda, hacer un alto para pasar del protagonismo a ser impulsores de nuevos liderazgos, capaces de hacer entrar al pueblo a la tierra prometida, como deseo de hacer algo grandioso para evitar otros 5 años de neoliberalismo mas.