PUNO en el lente de Martín Chambi



Escribe: Wálter Rodríguez Vásquez | Sociedad - 05 Nov 2009

La fotografía no siempre se le consideró un arte; su inclusión en el arte fue un proceso que comenzó con los fotógrafos retratistas, puesto que el “retrato fotográfico” tuvo gran acogida al reemplazar al retrato pintado, tanto por su menor costo como por su logro inmediato. Como una forma de comunicación visual, la fotografía es tan importante en casi todas las actividades humanas, que el turismo no puede prescindir de ella en todos sus componentes de difusión, publicidad, servicio, etc.
Hoy podemos contrastar realidades y fenómenos socio-culturales pasados con los actuales, gracias a los testimonios que infatigables y visionarios fotógrafos nacionales han logrado en su tiempo. Si son famosos y únicos los dibujos de Guamán Poma de Ayala realizados a comienzos del S. XVII, las miles de imágenes captadas por el “artista de la luz” el puneño Martín Chambi son también únicas y útiles para conocer nuestra historia, nuestras costumbres, personajes, paisajes, arquitectura, acontecimientos sociales, etc.

Martín Jerónimo CHAMBI JIMÉNEZ, nace en el distrito de Coaza, provincia de Carabaya el 5 de Noviembre de 1891, hijo de Félix Chambi y Fernanda Jimenez; casi niño, su primer contacto con la fotografía es en la mina Sto. Domingo donde trabajaba con su padre, luego viaja a Arequipa donde aprende el oficio de su maestro Don Max T. Vargas quien además le patrocina exposiciones en 1917 en el Centro Artístico de aquella ciudad.

Más tarde viaja a Sicuani, capital de Canchis-Cusco acompañado de su esposa Manuela López Viza y sus hijos Celia y Víctor donde instala su primer estudio y taller, el lugar es próspero por el desarrollo de la explotación e las fibras e alpaca y llama y su industrialización textil, allí en Sicuani nace su única hija fotógrafa Julia Chambi. Profesionalmente ya, en 1920 se instala en el Cusco atraído por su esplendor e historia y es en esta ciudad donde desarrolla su trabajo más importante y deslumbrante hasta sus últimos días. Allí también nacen sus hijos Angélica, Manuel y Mery y es esa ciudad donde logra dimensión universal por su trabajo.

Nuestro paisano Martín Chambi revela el universo mágico y cotidiano e la cultura andina, entregándole al mundo su valioso archivo fotográfico que contiene ceca de 30,000 negativos entre placas de vidrio películas flexibles, rollos de 120 y de 35 mm. material que se encuentra en estado de conservación en el Cusco, protegido y cuidado inicialmente por su hija Julia, fallecida el año 2003 y ahora por su nieto Teo Allain Chambi.

Redescubrir la obra de Martín Chambi en cada mirada, dimensionándola en el contexto del lenguaje fotográfico, es como para un arqueólogo descifrar los misterios de tantas culturas prehispánicas o para un antropólogo descubrir los fascinantes hechos culturales de su tiempo. Para el Perú Martín Chambi es el primer fotógrafo de sangre indígena puneña que retrató a su propio pueblo con altivez y dignidad. Sus retratos recuerdan los que en igual periodo, años 30, registro August Sander en Alemania. Pero si los retratos de Sander lucen abominables en la dureza de los rostros de la demencia del nazismo cercano, los rostros fotografiados por Chambi reflejan la dignidad de un pueblo refugiado en sí mismo, incómodo en las vestimentas impuestas, sometido, pero nunca humillado.

La obra de Chambi adquiere mayor significación a medida que el estudio sobre ella se extiende y profundiza en muchos lugares del mundo. Diversas instituciones y personajes se han interesado por investigar su obra, y muchas celebridades han escrito sobre ella. Centenares de textos, artículos y catálogos se han publicado; más de un ciento de exposiciones se han presentado sobre su obra, recorriendo el mundo hasta hoy.

Un altísimo nivel técnico, un magistral manejo de la luz y una mirada excepcional caracterizan a este creador y fotógrafo clásico, que bien podría llamársele como uno de los peruanos más universales del Siglo XX.

Muchas escenas de pueblos, personajes y costumbres del altiplano han sido captadas por el mágico lente de Martín Chambi, están escenas en el lago Titikaka, fiestas patronales, danzas nativas, paisajes y de Coaza su pueblo. A la ciudad imperial le dedicó la mayor parte de su arte, por ello lo consideran Ciudadano del Cusco; allí fallece el 13 de Setiembre de 1973.

Para el mundo del turismo, aún incipiente a principios del S. XX, Chambi publica en Sicuani la primera postal peruana, por esto y mucho más tenemos el reto de conocer y difundir su obra esencial.

Fuentes:
- Caja Municipal Cusco : “Calendario 2007”
- Flores Ochoa, Jorge: “El Qosqo de Martín Chambi”- Rec. IAA-Cusco No. 14-1994
- Huayhuaca, José Carlos: “Cien años de Martín Chambi” Rev. IAA-Cusco, Nº 13-1992


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