Friday 26.04.2024 | Actualizado 11:08 (hace 1992 días)
En el año 1900, la educación le estaba prohibida a los indígenas puneños y es allí que precursores de la educación se levantan para luchar contra las autoridades de la época por la creación de la escuela aymara y quechua. Esa es la dramática historia de amor y sacrificio que el largometraje “El último testigo” relata.
La película fue filmada en los exuberantes paisajes puneños. “El último testigo” es la más reciente producción puneña a estrenarse el 19 de diciembre próximo en la cual se narra la historia de un grupo de misioneros que intentan instaurar la educación del indio a inicios del siglo XX.
Hasta el momento se invirtió más de 60 mil soles, pero se estima que al finalizar se habrá invertido 120 mil soles aproximadamente. Dirigida por el cineasta Manuel Pascal, será presentada no solo en cines nacionales, sino también de Brasil, Alemania y Estados Unidos.
“Aquí (Puno) está los inicios de la educación indígena”, señala Moisés Rivera, productor de campo de “El Último Testigo”. “Es parte de nuestra historia y debemos estar orgullosos de ella”, finalizó el cineasta. (GRECIA RIVAS)
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